Por más que me lo he bebido no he conseguido aprenderme tu olor antes de que te vayas, sigo necesitando el calor de tu último abrazo incluso cuando te tengo cerca.
Y me doy cuenta de que solo es miedo, negarme a decirte que te quiero, y no te digo que te quiero, no es querer, pero si que quiero compartir contigo la almohada, que quiero desnudarte la columna vertebral hasta besar ese lunar, que me sigas leyendo los suspiros, y las miradas. Hacer el amor en calcetines todos los días por la mañana y oler el perfume de tu cuello durante horas, grabarme a fuego tu imagen fumando desnuda en las pupilas para que echarte de menos no sea tan insoportable cuando te vayas como lo es ahora, en esta noche interminable.
Britanny Noapte.