Las mismas palabras perdidas que solo encuentro en mis pupilas, pero que curiosamente solo las encuentro cuando te miran a ti, tus expresiones y tu mirada silenciosa, y se que muchas veces no entiendes nada, muchas veces yo entiendo demasiado. Muchas veces desearía decir que es por miedo, así al menos saldría corriendo y me aferraría a el, pero no la verdad es que ni una pizca de miedo, si es contigo no temo, pero si que temo cuando pienso que no será suficiente, debería de no pensar, entonces me sacarías otro vuelco en el corazón y las casualidades buenas le ganarán a la noche, cuando nada tiene sentido al menos me quedas tú. Renaciendo en ti, totalmente, y nada de miedo, es que no quiero, no puedo, como te quiero, ¿Como puedo quererte tanto? y me cosquillean las mejillas mientras sonrío, ¿cuantas llevo ya? son a ráfagas, trece sonrisas y una confesión. Te adoro, y me encanta besarte en la frente, y esa sonrisa que se cuela por tus labios, y tu frente arrugada al no entender, y mis ojos brincones, gracias al cielo que no se pueden ruborizar queriendo gritar, no sé si lo sientes, ¿será que lo siente? y si no lo siente no he echo un buen trabajo, por dios entonces necesito más botellas de zumo de uva y más pintura ¿más vino? solo contigo. Veinte canciones a desatiempo, no se si te partes igual al bailar, pero solo contigo las quiero bailar, y ya no ser más ese numero impar, ¿si te regalo esto me olvidarás? impresionante y extravagante volviéndolo todo al revés nunca pensé que llegaría a armar tanto revuelo, y ahora, eres toda una obra de arte. te jugo de uva tanto, que no te tomaría nunca para no acabarte, pero sí que te quiero tomar, ya ves solo pienso en ti y me contradigo.
Así que nunca encares la oscuridad
por que siempre podremos encontrar un camino
por que nada dura para siempre
incluso la lluvia de noviembre.