viernes, 1 de febrero de 2013

La memoria del mundo
se lee en el insomnio de la noche
Pones tu mano en mi espalda
apretando mis hombros
tus piernas se tornan alborotadas
me rindo a tu cuerpo y no logro respirar
como un suspiro retenido en mi tórax
que se extiende hasta la punta de tus dedos.
Cuando cayo mucho, y juego a ser misteriosa
el universo me susurra que esto solo
es una falacia con ojos de amor
La luna en las copas de los árboles
los árboles dentro de una mirada
tus piernas abiertas como una flor
tu cintura curva en la media noche
y el silencio de un sentimiento
escondido entre constelaciones ocultas.